Las ciudades anfitrionas, Rurrenabaque y San Buenaventura, acogieron el XI Foro Social Panamazónico (FOSPA), recibiendo a participantes de nueve países y creando un espacio de articulación y diálogo con una intensa agenda de actividades enfocadas en la elaboración de propuestas locales en defensa de la Amazonía.
Para ello, se establecieron asambleas de cada Eje Temático definidos: 1) Pueblos indígenas y poblaciones amazónicas, 2) Madre Tierra, 3) Extractivismos y alternativas, 4) Resistencia de las Mujeres.
Como IBIF, hemos apoyado la participación en el XI FOSPA de las organizaciones de mujeres de los territorios donde trabajamos: la Organización Regional de Mujeres Indígenas Chiquitanas (ORMICH), la Organización de Mujeres Indígenas Monkoxi de Lomerío (OMIML) y la Confederacion Nacional de Mujeres Indígenas de Bolivia (CNAMIB). Junto a estas organizaciones, reafirmamos nuestro compromiso con la gobernanza y el empoderamiento femenino en la gestión integral de los bosques y la defensa de sus territorios, reconociendo su liderazgo y resistencia en la construcción de un futuro más justo y sostenible.
“Las mujeres entendemos el derecho que tiene la naturaleza, entendemos que ella no puede protegerse sola sin nosotras, somos nosotras quienes debemos exigir ese derecho que tanto clama, es por eso que estamos acá” Wilma Mendoza, presidenta CNAMIB.
En el marco del Eje 4: "Resistencia de las Mujeres", la primera jornada del FOSPA reunió a diversas delegaciones y organizaciones de mujeres de la Panamazonía. Durante este día se llevaron a cabo conversatorios donde se abordaron temas cruciales como la autonomía indígena, la crisis climática y la resistencia de los pueblos amazónicos. Estos espacios permitieron reflexionar sobre las problemáticas y luchas territoriales, además de construir estrategias y propuestas para el futuro.
Si deforestan todo, no habrá agua. Si no hay agua no habrá sembradíos. Si no hay sembradíos no habrá alimentos. Es por eso que nosotras estamos haciendo incidencia; porque no queremos llegar a eso (…) desde donde estemos vamos a hacer fuerza para que no sean destruidos nuestros territorios. Rosita Pachurí, presidenta ORMICH
La jornada culminó con una marcha simbólica entre Rurrenabaque y San Buenaventura, seguida del Acto de Apertura, donde se enfatizó la importancia de la unión y la acción conjunta en la defensa de la Amazonía.
El segundo día, las distintas organizaciones de mujeres reafirmaron su compromiso con la protección de la Amazonía y el empoderamiento de sus comunidades. Delegaciones se trasladaron a diversas comunidades indígenas para conocer y discutir la participación activa de las mujeres en la defensa de sus territorios y derechos colectivos. Este encuentro permitió conocer las problemáticas locales y, al mismo tiempo, inspirarse mutuamente para la construcción de soluciones.
Las actividades del segundo día subrayaron la importancia de la resistencia y el liderazgo de las mujeres amazónicas, recalcando el poder de la colaboración y el apoyo mutuo en la construcción de un futuro más justo y sostenible.
El tercer día, las mujeres se organizaron diversos grupos de trabajo para visibilizar sus luchas, creando espacios cruciales para la construcción de redes de apoyo y la elaboración de estrategias comunes para enfrentar las múltiples problemáticas que las afectan. Uno de los eventos más destacados fue el Tribunal de Mujeres en Defensa de los Cuerpos y Territorios, un espacio de denuncia y visibilización de las violencias sufridas por las mujeres.
Al concluir el día, las distintas organizaciones de mujeres consolidaron una propuesta integral que recoge las demandas y soluciones planteadas por las diversas naciones y comunidades participantes. Esta propuesta nutrió el documento final del XI FOSPA como un posicionamiento político y una agenda de acciones estratégicas para la Amazonía.
Nosotras como lideresas hemos estado en todos los momentos históricos de las luchas indígenas, ahora defendamos lo que es de nosotros, empezando a proponer, fortaleciéndonos, conociendo nuestros territorios, formando una red de monitoras ambientales, Estamos sufriendo a causa de todo el modelo extractivista y el cambio climático, (…) ese modelo nos está llevando a la sequia, a el hambre, a la división. (…) Tenemos que empezar a fortalecernos, pero no nosotras, si no las que vienen atrás, a esas nuevas lideresas. Aylin Vaca Diez, cacique género CICOL
Tras tres jornadas de diálogo internacional con más de 1000 participantes, el sábado 15 de junio se aprobó en plenaria las conclusiones del foro. El “Mandato del XI Foro Social Panamazónico” es el documento síntesis de las conclusiones aprobadas en las asambleas de cada Eje Temático, y servirá como guía para las acciones futuras en defensa de la Amazonía.
“Nosotras decimos sin las mujeres no hay autonomía, no hay procesos ni caminos a seguir. Las mujeres somos vida, somos naturaleza, somos territorio.” Wilma Mendoza, presidenta CNAMIB
MADATO DEL XI FORO SOCIAL PANAMAZONICO
Puedes ver el documento completo en: https://www.forosocialpanamazonico.com/el-xi-fospa-genera-un-mandato/
RESISTENCIA DE LAS MUJERES
42.Las mujeres panamazónicas estamos en primera línea de lucha y defensa por la soberanía de nuestros cuerpos, la madre naturaleza y los territorios. Nos manifestamos en contra de las opresiones del patriarcado, el colonialismo, el capitalismo y los extractivismos. Denunciamos la dominación geopolítica global sustentada en fundamentalismos políticos, económicos y religiosos que nos marginan e imponen estilos de vida que no concuerdan con nuestra identidad cultural. Repudiamos la falta de respeto continua a nuestros derechos humanos, autonomía, autogobiernos y ancestralidades, bajo un marco de "democracias" que nos discrimina y violenta. Destacamos la necesidad de luchar unidas para transformar esta situación de opresión, promoviendo democracias inclusivas que respeten nuestras formas de liderazgos y procesos comunitarios
43. Manifestamos que la ofensiva capitalista, neoliberal y los procesos de despojo que afectan a la Panamazonía, profundizan la explotación extractiva bajo nuevas formas de esclavitud y vulneran los cuerpos de las mujeres, niñas y adolescentes, el cual es nuestro primer territorio. No toleramos más la violencia sexual, los feminicidios, las desapariciones y los ataques a nuestros derechos sexuales, reproductivos, de diversidad y disidencia de género. Rechazamos la militarización de los territorios y resistimos.
44.Exigimos el fortalecimiento de iniciativas económicas locales, la participación efectiva de los pueblos indígenas en la protección de la madre naturaleza, la promoción de espacios libres de violencia y la garantía de la salud integral de las mujeres y la niñez. Demandamos de manera urgente políticas de salud que respeten nuestras sabidurías ancestrales y revaloricen a nuestros diversos médicos tradicionales, sus medicinas y prácticas.
45.Planteamos la revalorización de las identidades culturales indígenas, el fortalecimiento de la formación y educación en lengua materna en todos los niveles, el acceso a los medios tecnológicos y los nuevos conocimientos. Así mismo necesitamos generar acciones tendientes a la eliminación de la violencia de género, la promoción de la participación política segura de las mujeres, la elaboración de normativas a nivel comunal y público que permitan la participación política en condiciones de igualdad entre varones y mujeres en respeto de la alternancia. Sostenemos la necesidad de la creación de una red de articulación entre las organizaciones de mujeres indígenas.
46.Hacemos nuestra la declaración de las Mujeres en Resistencia y la sentencia del Tribunal de las Mujeres y nos unimos en una sola voz para gritar: NUESTROS CUERPOS Y TERRITORIOS NO SE TOCAN, NO SE VIOLAN, ¡NO SE
MATAN!